27 de julio de 2012

Mangas

¡Hoy mismo me di cuenta de lo fastidiosas que son! Se meten por todas partes, especialmente esas que son considerablemente largas. Y ni hablar de usar mangas 3/4, las detesto, es como si me quedara chico todo lo que uso; no logro poder quitarme esa sensación de encima.

Lo que pasó fue lo siguiente:
Estaba cocinando y me arremangué para que no se mancharan pero al cabo de unos segundos empezaron a caer, el problema es que para entonces ya tienes las manos sucias y ya no te las puedes subir a menos que te laves las manos o haya alguien más.

Pero no pasa solo con eso, hay muchos ejemplos más...
- Pintura: mangas de dos colores (o más)
- Palomitas de maiz: mangas aceitosas o pegajosas, dependiendo de sus preferencias
- Comer spaguetti: manga a la italiana
- Recoger algo del agua (piscina, mar, etc): mangas de aquaman
- Lavarse los dientes: mangas blancas y tiesas

Y hay mucho más... ¡solo piensen en las posibilidades!



19 de julio de 2012

Neblina

Salgo de mi casa, meto las manos a los bolsillos y suspiro, sale el vaho de inmediato mientras recuerdo esos días en que pretendía fumar.

Esos días de niebla son magníficos. No entiendo por qué tan poca gente de las que conozco pueden disfrutar de un día de invierno. Cuando se los comento vuelan comentarios como "Ay, ¿Cómo puedes?" o tal vez "Nooo, por mi no pasaría otro invierno, mejor que sea verano todo el año".

Me gusta salir a caminar en esos días, donde entre menos vea enfrente mío es mejor. Se vuelve como una continuidad de sorpresas mientras tratas de adivinar que es esa nueva sombra misteriosa en un lugar donde antes no había nada. Tal vez sea una persona fumando, o un nuevo letrero... ¿quién sabe?

El momento del regreso a casa es siempre diferente pero gratificante, escapas del frío que tantos odian y, en mi caso, apenas empiezas a pensar en eso... el calor. Puede ser una taza de té o café, o a lo mejor una chimenea, ¿y qué tal un baño caliente?

En fin, ojalá baje la neblina pronto, me hace falta un turbio paseo por la ciudad, tal vez lleve un buen té en mi fiel termo y me siente en una plaza a sentir el tiempo pasar con la gente.