Lo que pasó fue lo siguiente:
Estaba cocinando y me arremangué para que no se mancharan pero al cabo de unos segundos empezaron a caer, el problema es que para entonces ya tienes las manos sucias y ya no te las puedes subir a menos que te laves las manos o haya alguien más.
Pero no pasa solo con eso, hay muchos ejemplos más...
- Pintura: mangas de dos colores (o más)
- Palomitas de maiz: mangas aceitosas o pegajosas, dependiendo de sus preferencias
- Comer spaguetti: manga a la italiana
- Recoger algo del agua (piscina, mar, etc): mangas de aquaman
- Lavarse los dientes: mangas blancas y tiesas
Y hay mucho más... ¡solo piensen en las posibilidades!